¿Qué ocurre cuando lo que ves con tus propios ojos contradice lo que dice la ciencia? ¿Y si durante el eclipse no fue la Luna la que tapó al Sol… sino otra cosa?
Este no es un artículo científico tradicional. Es un testimonio directo, real y vivido, escrito desde el sur de la Florida durante el más reciente eclipse solar. Una experiencia que desafía lo que nos dicen las apps, los libros de astronomía y los documentales del sistema.
Una observación incómoda: el Sol, la Luna... y algo más
Estaba preparado. Tenía mis filtros de rayos X listos. Me había informado, revisado simulaciones astronómicas, alineaciones y horarios. Me encontraba entre la 1:00 y las 3:00 p.m., mirando al cielo.
El Sol comenzaba a ser eclipsado…
Pero la Luna no estaba allí.
La vi, sí, pero 20 grados a la derecha del Sol, bien visible. Y lo más sorprendente: se quedó allí todo el tiempo. No se movió al frente del Sol. No fue ella la que generó la sombra.
Mientras tanto, algo sí eclipsaba al Sol. Una masa oscura, definida, bloqueaba su luz. El cielo se oscureció, se volvió gris, la atmósfera cambió. El aire parecía más pesado. Pero esa masa… no era la Luna.
Apps y mentiras visuales
Las aplicaciones astronómicas mostraban la Luna exactamente sobre el Sol. Bonito en la pantalla. Pero el cielo no mentía: la Luna estaba fuera de esa escena.
Entonces… ¿qué la ocultaba?
¿Un cuerpo invisible?
¿Un sol oscuro, una esfera de energía etérea?
¿La manifestación del mítico Black Sun?
¿Qué es el Black Sun y por qué se relaciona con los eclipses?
El Sol Negro (Black Sun) es un símbolo oculto que aparece en textos alquímicos y gnósticos. Representa una fuente de energía oscura, invisible, pero poderosa. Algunos creen que:
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Es un segundo sol, oculto tras el velo electromagnético de la percepción.
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Se manifiesta solo en momentos de cambio, como los eclipses.
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No refleja luz, pero absorbe energía, genera sombra, altera la vibración.
Durante siglos se ha dicho que este cuerpo no debe ser visto. Y quienes lo ven… son ridiculizados.
No soy el único: otros también lo han visto
No soy el único. He leído testimonios de personas en distintos países que han dicho:
“Vi la Luna a un lado. No fue ella quien eclipsó el Sol.”
“Durante el eclipse, algo me dijo que eso no era natural.”
“Sentí una presencia. No física, pero densa. Como si el cielo se abriera a otra dimensión.”
Estos relatos han sido censurados, burlados o simplemente ignorados. Pero no pueden ser todos locos. Tal vez somos simplemente despiertos.
¿Qué hacer con esta verdad?
Créela. Escríbela. Compártela. Porque la verdad que se vive con los propios ojos vale más que mil libros.
Este eclipse fue un ritual cósmico. Y el Sol Negro estuvo allí.
No para todos. Solo para los que estaban listos para verlo.
Un llamado a los observadores del Black Sun
Si tú también viste algo distinto en ese eclipse…
Si sentiste que el cielo escondía algo…
Si sabes que no fue la Luna la que se cruzó…
Escríbelo. Testifícalo. Únete a la conversación.
Puedes dejar tu comentario o escribirnos directamente. Este post es un espacio de resistencia contra la mentira astronómica institucional. El Sol Negro está allí. Y lo vimos.
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