Hay una profecía bíblica que menciona el río Éufrates y habla sobre la liberación de ángeles en relación con eventos apocalípticos. Esta profecía se encuentra en el Libro del Apocalipsis (Revelación), en el Nuevo Testamento de la Biblia, específicamente en Apocalipsis 9:13-15.
El pasaje dice:
"El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de los cuatro cuernos del altar de oro que estaba delante de Dios, y decía al sexto ángel que tenía la trompeta: ‘Suelta a los cuatro ángeles que están atados junto al gran río Éufrates’. Y fueron desatados los cuatro ángeles que estaban preparados para la hora, día, mes y año, para matar a la tercera parte de la humanidad."
Esta profecía describe a cuatro ángeles que están atados junto al río Éufrates y que serán liberados como parte de los eventos apocalípticos que se desarrollan durante la Gran Tribulación. Según la interpretación tradicional, estos ángeles no son seres benévolos, sino que se asocian con el juicio y la destrucción, ya que su liberación resulta en la muerte de una tercera parte de la humanidad.
El descenso del nivel del Éufrates ha llevado a algunos a recordar esta profecía y a especular sobre su cumplimiento en tiempos modernos. Aunque muchos ven esta mención de ángeles como un simbolismo que representa juicios divinos o fuerzas destructivas, algunos grupos creen que podría haber un evento literal asociado con esta disminución de las aguas del Éufrates, considerando que el río ha jugado un papel crucial en las civilizaciones antiguas y las profecías bíblicas.
Este tipo de profecías ha sido interpretado de diferentes maneras a lo largo de los siglos, y aunque el descenso del Éufrates es una realidad debido a factores ambientales y de gestión humana, algunos lo ven como una señal de eventos futuros importantes, basados en las escrituras bíblicas.
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